martes, 14 de enero de 2014

The adventure begins


Empieza una nueva etapa de Minorías Creativas. Ahora el Grupo Ancla tomará el protagonismo y, además de su tradicional lema: "¡atrévete a ser diferente!", asume también el lema kantiano: "¡atrévete a pensar!"

¿Te unes?

martes, 4 de junio de 2013



Del Icfes...

María Camila Blanco Lozano- Gimnasio Iragua 10 B

Durante la mayor parte de nuestra niñez estudiamos día a día,  pero nunca nos ponemos a pensar si estudiamos para sacar buena nota o para aprender; cuando crecemos la vida nos pone obstáculos más grandes y ya no pensamos en una buena nota, sino en sacar buenos resultados en el Icfes o en el BI, olvidando lo más importante: aprender. 
Para entrar a una universidad se debe presentar el Icfes que es el examen de Estado en el que, según este, “se miden los conocimientos adquiridos por cada alumno” y que según muchos, es el instrumento que permite a los estudiantes identificar fortalezas y debilidades académicas. A pesar de lo dicho por los del Icfes y por otras personas pienso que este examen no dice la verdad respecto de nuestro aprendizaje porque el conocimiento que adquiramos en el transcurso de la vida y de los años en el colegio, no puede ser  evaluado en un día o en un examen. En el mundo existen demasiadas competencias y el Icfes solamente evalúa tres: la interpretativa, la argumentativa y la propositiva, entonces es ilógico pensar que el Icfes realmente evalúa las capacidades de nosotros, los seres humanos. Ahora, si el Icfes solo evalúa estas 3 competencias se tiene que el ingreso a la universidad depende de que los estudiantes demuestren su capacidad en estas 3 competencias específicas, por lo cual me pregunto, ¿y el resto? ¿son menos importantes?.
Pink Floyd - "The wall"
Cosas como el carácter, los valores morales, las habilidades del campo artístico, el escribir un ensayo, la formación integral, entre otros, no los evalúa el Icfes pero son aspectos muy importantes para ser un buen trabajador y ciudadano.  El Icfes lo único que comprueba es si estudiamos para este examen o no, más no nuestros conocimientos. Yo ya he comprobado que el Icfes es una gran mentira, en mi primer simulacro mi mayor puntaje fue el correspondiente al área de Lenguaje, aún cuando sé que es en lo que más dudo y lo que más me falta conocimiento. Pienso que en este caso fue suerte, pero si el Icfes evalúa la  suerte  no está evaluando lo que supuestamente debería evaluar, a saber, el conocimiento.
Por otra parte, en el Icfes se dice que se evalúa el pensamiento crítico pero en realidad el Icfes exige respuestas que prácticamente son de memoria, lo cual al ser así, muy probablemente 6 meses después de estudiar para presentarlo se nos va a olvidar la mayoría de las cosas. Además de esto, al evaluar las competencias la pregunta que surge es ¿cómo se puede evaluar una competencia de saber argumentar con selección múltiple? Ahí y en otros aspectos creo que los criterios de evaluación del Icfes son subjetivos.
Finalmente, debo anotar que el Icfes para mí es una mezcla de angustia y tensión que se nos impone a los estudiantes para que estudiemos de memoria y saquemos una buena nota pero no por aprender.

sábado, 25 de mayo de 2013







LA FILOSOFÍA MORAL

Paula Isabel Barbosa - Iragua prom 2013
Dibujo de Paula Isabel Barbosa
Uno de los mayores problemas que ha abatido a nuestro mundo es el asunto de la moralidad de los actos y todo aquello que circunda este tema, tal es el caso de preguntas como ¿los principios éticos son innatos o aprendidos?, ¿la moral se deriva de la razón o de las pasiones? entre muchas más incógnitas que el día de hoy se siguen debatiendo. Ahora, uno de los interrogantes más ricos e interesantes sobre este tema es si la moralidad de los actos es la misma para todos y por eso me pregunto, ¿habrá algunos principios éticos que son universales? ¿Qué piensas?

lunes, 20 de mayo de 2013



Conoce bien aquel que vive
Laura Mora Barreto -Gimnasio Iragua 11

Gabriella Barouch 
Conoce bien aquel que vive
que detrás de cada rosa
late un corazón,
que el vacío del espacio inmenso
de materia esta lleno,
que la causa es efecto,
y que sin asombro no hay intelecto.
Conoce bien aquel que vive
que detrás de cada noche oscura
brilla en otro lado el sol.
Que en los rostros de la gente,
hay más fondo que velo,
que en la llama de la vela
se esconde un gran misterio.
Conoce bien aquel que vive.
Que conocer es quitarse la máscara de lo obvio,
para descubrir en la piel del misterio el ruido del silencio,
y en los asombros del día a día
el mágico sentido de la existencia.

viernes, 28 de septiembre de 2012

A propósito de la escritura: ¿Para qué sirve un libro sin imágenes ni diálogos en un mundo sin color?



Por Maria Fernanda Gallego, Grado Décimo, Gimnasio Iragua.


Desde un comienzo un libro nunca me llamo la atención, su portada, y sus páginas de infinitas letras me llenaban la cabeza de aburrimiento y la verdad, de un desprecio total hacia ellos. Con el paso de los años encontré un gusto definitivo, escribir. Escribir me permitía conocerme a mí misma, y opinar sobre diversos temas  y fue ahí cuando pensé ¿por qué no escribir para mí?¿ por qué no escribir mis pensamientos e ideas a gran escala del cuento ideal y poder leerlos después y así, si poder sentir un verdadero placer al abrir las páginas de un libro?.
Preparada con mi nueva meta de escribir para mí, me senté en una mesa con lápiz y papel a la mano, trate de escribir la primera letra de mi gran escrito cuando me di cuenta de que nada podía escribir.  Me sentí frustrada, triste, decepcionada… no sabía nada, todo eran temas populares, todo era opinión, cosas que ya sabía y que si leía ya iba a saber el final. Mi idea había fracasado.
Me di cuenta de que no podía escribir, porque no había visto cómo lo hacían otros, me había cerrado a un maravilloso mundo de ideas locas, de expresiones extrañas, de amores eternos, de terror, de historia  y muchísimas cosas más. Estaba viviendo en un mundo vacío, sin ideas, superficial, simplemente por miedo a perder mi tiempo en la lectura y que al final no dijera nada, miedo a esos libros “gorditos” sin ilustraciones y los títulos poco llamativos. Después de eso se me ocurrió empezar a leer un libro, de esos que me daba pereza hasta voltear a mirar. Fue todo un sacrificio, pero mi pasión, escribir, me lo ordenaba. Empecé a leer el libro con un título de palabras vacías que juzgando a la vista no parecía lo suficiente para satisfacer mis ideales y duras criticas. La primera página era un poco confusa, presentando personajes y lugares, pero empecé a leer cada vez más y así me fui enganchando al libro, no podía dejar de leer, sentía la necesidad, la angustia de saber lo que iba a pasar después. Estuve sentada horas y horas hasta que mis ojos me pidieron un descanso, era como tener una película en mi cabeza, era definitivamente una nueva experiencia para mí.
Fue ahí Cuando me di cuenta de la magia de los libros, esa emoción y necesidad de acabar el libro era incomparable con alguna otra sensación. Cuando lo terminé sabía un poco más, ya no sabía qué hacer, debía ocuparme otra vez. “Un entretenimiento propio y único” fue entonces  que fui leyendo cada vez más, me fui enriqueciendo de cosas sobre las que podía escribir, me fui entrenando en nuevas formas de escribir, de cómo debía ser un escrito, y de cómo ordenar mis ideas. Pero lo más importante es que descubrí que no todo lo bueno estaba en mi, descubrí que necesito de muchas ideas y opiniones, que no tiene gracia escribir de mí para mí porque no tendría esa magia de encontrarse con un maravilloso final.  Escribir necesita de la lectura puesto que esta nos enriquece  para que nosotros después podamos expresar nuestras locas ideas y darle color a un mundo que desde el comienzo fue pintado en blanco y negro. 

jueves, 20 de septiembre de 2012

Encadenados


Ciencias y letras buscan la verdad. Ni la una ni la otra terminan por encontrarla. Están encadenadas. En la imagen aparecen Habermas (representante de las letras) y Hawkins (representante de las ciencias). Una imagen es la media vuelta de la otra, pues la ciencia está encadenada si y sólo si la filosofía lo está. 

martes, 18 de septiembre de 2012

El equilibrio entre ciencias y letras (Vídeo)




Natalia Marín y Camila Escobar hacen una breve reflexión audiovisual sobre las ciencias y las letras.

Este post participa en la I Edición del Carnaval de Humanidades